Te comparto la vida misma en un beso fingido

y es que amiga mía al paso de la verdad la mentira está más cerca,
si es de dos,
el cielo se ha perdido pues en mi corazón hay alguien más,

al parecer la puesta de sol ha salido del sur
y en mi alma ni las sonrisas se alcanzan a oír,
pero que queda sino solo un segundo eterno entre mis labios y los recuerdos,

tu piel sobre mi piel, tus caricias sobre los deseos,
los deseos sobre la luna y la sensación de la noche helada,
el coraje del alma deshaciéndose lentamente
en la violenta escena que formamos,
los ojos llorosos y una lagrima en soledad,
es más, puede ser que del cielo a la eternidad no pueda ver tus labios,

pero desde las entrañas te querré, desde el olvido desvestiré la fragancia que envolvió las flores y el afecto en mi, veme, abrázame,
se perceptiva, moja tus dedos con mis lagrimas y sacia la sed de la soledad en mis brazos, no hay espacio que sea vacio si estoy contigo,
siendo tu y yo lo somos todo.